Todos tenemos necesidad de compartir nuestros conflictos, de expresar nuestro malestar y de intentar resolver las contradicciones que nos surgen. Pero la mayoría de las personas no sabemos cómo hacerlo. A veces quedamos atrapados en las dinámicas que mantenemos, en las insatisfacciones o en las frustraciones que no podemos dejar atrás.

Lo único que sabemos es que estamos sufriendo.

Cada uno tenemos una forma particular de situarnos en el mundo. Por distintas razones todos nos podemos ver necesitados de un apoyo y un guía para frenar el estrés y la ansiedad que nos ahoga, para seguir pisando fuerte en la vida, para vivirla y no verla pasar frente a ti mirándola simplemente, a veces alguien nos tiene que ayudar a dar un paso adelante e iniciar un cambio.

Los terapeutas estamos a tu lado para ayudarte, acompañarte y guiarte.
Sin soltarte de la mano hasta que vayas sintiéndote con capacidad para superar cualquier tipo de obstáculos, organizar tus pensamientos, tus sentimientos, y tu sentir en la realidad actual en la que estás inmerso.

Te ayudamos a elaborar las experiencias difíciles que atravesaste…o aquellas de las que sientes no puedes salir, siendo un lastre que arrastras…. Te ayudamos a dar comprensión a la imagen que tienes sobre ti mismo para que puedas agitar tus alas y volar con fuerza.

No todas las personas podemos entender lo que nos ocurre, por eso necesitamos que nos escuchen sin juzgar, sin condiciones.
Es un trabajo de «a dos» con compromiso y presencia para descubrir las causas que nos impiden disfrutar de nuestra vida con mayor plenitud.

A veces no existe una única causa de desarmonía, de desequilibrio…sino que hay diversos factores que provocan nuestro malestar y que nos conducen a silenciar nuestro dolor.
Experiencias difíciles del pasado pueden afectar el modo en que nos comportamos y nos relacionamos con el presente, el modo en que hoy interpretamos nuestro mundo.